Galicia es una comunidad que tenemos muy cerca y a la que solemos escaparnos a lo largo del año, ya sea para disfrutar de sus playas o de su gastronomía. Si tienes pensado ir con niños, te dejamos 3 lugares mágicos para que disfrutéis en familia.
Dos de ellos se encuentran en Pontevedra y el otro en Lugo, a una hora de Ponferrada.
La Aldea de los Grobits en a Illa da Toxa
En la famosa isla de la Toja existe un lugar mágico habitado por unos pequeños seres llamados grobits. Viven en las profundidades de las aguas termales y salen al exterior por pequeñas grietas hasta el pozo que se encuentra en la aldea. Entran en las casas para reponer fuerzas y se esconden de los humanos, pero si tienes suerte puedes llegar a verlos.
La aldea de los Grobits está inspirada en el universo del escritor J.R.R. Tolkien, autor de El hobbit y el Señor de los Anillos, entre otros. Hay varias casas en miniatura construidas con piedras y semienterradas, alguna de ellas cubiertas con hierba.
Sólo podemos acceder a una de ellas, la más grande, que además tiene una salida secreta por la que los niños disfrutarán adentrándose en ella.
En la aldea además de las casas hay diferentes juegos fabricados en madera. No es un parque infantil muy grande, pero es muy curioso y merece la pena acercarse a conocerlo.
La entrada es gratuita y está abierto todo el año.
Si visitas la isla no te puedes perder su característica ermita recubierta de conchas de vieira. Está consagrada a san Caralampio y a la Virgen del Carmen. Es del siglo XII, aunque el recubrimiento de conchas es posterior.
La Ciudad de las Hormigas en Lugo
Se encuentra muy cerca de la ciudad de Lugo. En una amplia extensión de terreno hay decenas de personajes fabricados con materiales reciclados. Es un proyecto que pretende fomentar el reciclaje, la agricultura sostenible y la solidaridad entre vecinos.
A lo largo de una camino, y pasando por zonas muy diferentes, verás los personajes creados con material reciclado. Hay muchas hormigas, una araña, serpiente, pulpo y muchos más animales. Están construidos con latas, calzado viejo, tuberías. Todo se aprovecha para crear los diferentes habitantes de esta ciudad tan peculiar.
Una de las construcciones que más gusta a los niños es la nave espacial. En ella se pueden subir los niños.
No hay que pagar entrada, lo que sí hay es una hucha de cerdito al final del recorrido, para que dejes, si quieres tu donativo y ayudes al mantenimiento de este proyecto tan interesante.
Bosque Encantado de Aldán
Otro de los lugares mágicos para visitar con niños es el Bosque Encantado. En las Rías Baixas, concretamente en Aldán, se encuentra este bosque de cuento, que tiene hasta un castillo.
Hay varias entradas para acceder a él y el camino no es muy largo. Atraviesas un pequeño bosque de castaños, robles, abedules y eucaliptos hasta llegar al castillo. Este terreno pertenecía a los Condes de Canalejas y era su finca de recreo. Ahora es de disfrute público, excepto el pazo que es de uso privado.
El castillo empezó a construirse en los años 60 y no llegó a terminarse. Sólo está construida la fachada y podemos acceder a él por la parte de atrás. Es muy bonito y merece la pena acercarse y que los niños disfruten de este lugar de cuento. Al lado se encuentran los restos de un antiguo acueducto que transportaba el agua desde lo alto de la montaña hasta la fábrica de salazón del pazo.
No hay que pagar entrada y el acceso está abierto todo el día.
