Mallorca es una de las islas más grandes y más visitadas de las Islas Baleares. Cualquier época del año es buena para visitarla, pero si vas en verano aprovecha para disfrutar de sus playas y calas con aguas de color turquesa.
Hoy hacemos un recorrido por la isla para conocer 5 lugares imprescindibles: calas, cuevas, puestas de sol y pueblos con encanto.
Cuevas del Drach
En el sur de la isla, en Porto Cristo, se encuentra uno de los lugares más visitados de Mallorca. Son cuatro cuevas formadas por la erosión del agua de lluvia durante millones de años y que están conectadas entre sí.
En su interior se encuentra el lago Martel, uno de los mayores lagos subterráneos del mundo, con sus 115 metros de longitud y 30 metros de anchura. Después de dar un paseo por las cuevas y admirar las estalactitas y estalagmitas podemos disfrutar de un concierto en el lago y después de un paseo a bordo de una barca.
Pueblos de la Sierra de Tramuntana
La sierra de Tramontana se encuentra en el noroeste de Mallorca. Su nombre se debe al viento que llega de esa dirección. En el año 2011, el paisaje cultural de esta sierra fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Destacan, en su escarpada orografía, picos de más de 1.000 metros.
Valldemossa con sus estrechas callejuelas y su rico patrimonio cultural. Es un pueblo que sirvió de inspiración a Frèderic Chopin. Imprescindible la visita al Monasterio de Real Cartuja.
Deyá es un precioso pueblo que se encuentra sobra la ladera de la montaña y muy cerca del mar.
Sóller es famoso por sus calles empedradas y por sus naranjas. En la plaza de la Constitución se encuentra la iglesia de Sant Bartomeu, un imprescindible si visitas este pueblo.
Fornalutx es la única localidad de las Islas Baleares que pertenece a la Asociación de Pueblos Más Bonitos de España. No es de extrañar, pues sus calles sinuosas y empinadas con casas de piedra lo convierten en un lugar muy especial.
Pero hay muchos más pueblos increíbles en esta zona. No te pierdas 5 pueblos imprescindibles en la Serra de Tramuntana.
Sa Calobra y el Torrent de Pareis
Es otro de los imprescindibles. También se encuentra en la Sierra de Tramuntana, en el noroeste de la isla. La carretera que nos lleva a esta zona es impresionante, aunque está llena de curvas nos deja un paisaje increíble.
Torrent de Pareis es un cañón de tres kilómetros de profundidad formado por la acción del agua. Para llegar a esta playa hay que recorrer a pie un par de túneles iluminados. No hay arena en esta zona, la playa es de piedra, pero es una de las más impresionantes de la isla.
Caló des Moro y Es Trenc
Caló des Moro es una de las calas más bonitas de Mallorca. El color de sus aguas cristalinas es precioso. En verano es muy complicado poder acceder a ella, porque casi no tiene arena y suele estar siempre llena de gente. Además para llegar a ella tienes que caminar un poco, pero merece la pena.
Al lado se encuentra Es Trenc, otra de las playas más famosa de la isla.
Sa Foradada
Este es uno de los mejores lugares para ver el atardecer. Es un saliente rocoso en la costa con un agujero. Es el lugar preferido de los lugareños y turistas para disfrutar del atardecer. Se encuentra entre Valldemossa y Deià.
Puedes disfrutar de una bebido en su chiringuito, pero para eso tienes que ir con tiempo para no quedarte sin sitio o caminar un poco por sus senderos y disfrutar del atardecer en soledad.